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Compra saludable y equilibrada en el supermercado: consejos útiles

La alimentación es uno de los pilares fundamentales de nuestra salud y bienestar. En España, los supermercados son el lugar donde muchas personas realizan su compra diaria. Sin embargo, ante la gran variedad de productos disponibles, puede resultar un desafío escoger aquellos que sean saludables y contribuyan a una dieta equilibrada. En este artículo, te ofrecemos consejos útiles para tus compras en el supermercado, permitiéndote tomar decisiones más informadas y beneficiosas para tu salud.

Conociendo las secciones del supermercado

Antes de sumergirte en tu lista de compras, es crucial que conozcas cómo se organiza un supermercado típico en España. Generalmente, las tiendas están divididas en diferentes secciones, cada una con su propia variedad de productos. Desde alimentos frescos hasta productos envasados, entender estas secciones te ayudará a localizar rápidamente lo que necesitas.

La sección de frutas y verduras es fundamental. Aquí puedes encontrar productos frescos, de temporada y muchas veces locales. Los supermercados suelen ofrecer una amplia gama de opciones, desde frutas tradicionales como la manzana o el plátano, hasta verduras menos conocidas. Recuerda que optar por productos frescos y de temporada no solo es más saludable, sino que también suele ser más económico.

Otra área importante es la de los lácteos. Esta sección incluye leche, yogures, quesos y otros productos lácteos que son fuente de calcio y proteínas. Sin embargo, es recomendable prestar atención a las etiquetas y elegir opciones bajas en grasa y sin azúcares añadidos, especialmente en yogures.

Eligiendo productos saludables

Una vez que conoces las secciones, es esencial saber cómo elegir productos en cada una de ellas. Comencemos por las frutas y verduras. Al momento de seleccionar, busca aquellos que tengan un color vibrante y que estén firmes al tacto. Esto generalmente indica frescura. Además, es recomendable preferir fruta y verdura de temporada, que suelen tener un mejor sabor y ser más económicas.

En la sección de cereales y legumbres, es importante optar por variedades integrales. Esto significa que deben contener el grano entero, lo que proporciona más fibra y nutrientes. Por ejemplo, elige arroz integral, pan integral y pasta integral en lugar de sus versiones refinadas. Las legumbres, como los garbanzos y las lentejas, son una excelente fuente de proteínas y fibra, y deberías incluirlas de forma regular en tu dieta.

En el pasillo de los productos enlatados y conservas, asegúrate de revisar los ingredientes y el contenido de sodio. Prefiere aquellos que estén en agua o su propio jugo, evitando productos con azúcares añadidos o conservantes innecesarios. Las conservas de pescado, como el atún o las sardinas, son una alternativa saludable y rica en omega-3.

La importancia de leer las etiquetas

Leer las etiquetas de los productos es una de las habilidades más importantes que puedes desarrollar al hacer la compra. Las etiquetas te proporcionan información valiosa sobre el contenido nutricional del producto, así como sobre los ingredientes que lo componen.

Un aspecto clave a tener en cuenta es el tamaño de la porción. Muchas veces, las cantidades que aparecen en las etiquetas son menores de lo que realmente consumimos, por lo que es esencial multiplicar los valores según la cantidad que vamos a comer. También presta atención a la cantidad de azúcares añadidos, grasas saturadas y sodio, y modera la compra de aquellos productos que contengan altos niveles de estos componentes.

Otro consejo es buscar productos que sean bajos en grasas trans, que son perjudiciales para la salud cardiovascular. Un producto con una lista de ingredientes corta y comprensible es generalmente una mejor opción que aquellos con muchos aditivos y conservantes.

Planificación y listas de compra

La planificación es clave para llevar a cabo una compra saludable. Antes de ir al supermercado, dedica tiempo a elaborar un menú semanal. Esto te permitirá saber exactamente qué alimentos necesitas y evitarás las compras impulsivas. Una lista de compra te ayudará a enfocarte en lo que realmente necesitas y a resistir la tentación de adquirir productos poco saludables.

Es útil incluir una variedad de alimentos en tu lista que abarque todos los grupos alimenticios: frutas, verduras, proteínas, lácteos y cereales. Intenta elegir al menos un producto de cada grupo, lo que te asegurará una dieta equilibrada a lo largo de la semana.

También puedes planear tus comidas basándote en ofertas especiales o productos de temporada que encuentres en el supermercado. Esto no solo es una excelente manera de ahorrar dinero, sino que también te ayudará a incorporar nuevos alimentos a tu dieta.

Consejos para ahorrar en la compra

Hacer una compra saludable no tiene por qué ser costoso. Existen varias estrategias que puedes seguir para ahorrar dinero sin sacrificar la calidad de tus productos. Una de las formas más eficaces es comprar en grandes cantidades. Muchos supermercados ofrecen descuentos por compras al por mayor, lo que te permitirá ahorrar en productos que sueles utilizar con frecuencia.

Además, no olvides que los productos de marca blanca o de la marca del supermercado suelen ser más económicos y, en muchos casos, ofrecen una calidad comparable a los productos de marcas reconocidas. Asegúrate de leer las etiquetas y comparar los ingredientes para encontrar la mejor opción.

Otra manera de ahorrar es aprovechar las ofertas y promociones. Consulta el folleto semanal del supermercado, donde se suelen detallar los productos en oferta. Planifica tus comidas en función de estas ofertas y evita caer en la tentación de comprar disponibilidad deseada sin necesidad.

Compras responsables y sostenibles

La compra responsable también es parte de la alimentación saludable. Al elegir productos, considera aquellos que sean sostenibles y respetuosos con el medio ambiente. Opta por frutas y verduras de producción local, que no solo son más frescas, sino que también apoyas a los agricultores de tu comunidad.

Además, intenta reducir el uso de plásticos. Lleva tus propias bolsas y evita comprar productos que estén sobreenvasados. Muchos supermercados ahora también ofrecen opciones sin envases o a granel, lo que te permite llevar a casa solo la cantidad que necesitas.

Al elegir productos, también es recomendable verificar si son orgánicos o de comercio justo, ya que estos suelen tener un menor impacto ambiental y garantizar condiciones laborales justas para los productores.